Matarraña en autocaravana

30 de Junio de 2011

Un nuevo relato de unos clientes que era su primera vez.

De las palabras con que cuentan su viaje denotan lo positivo de la experiencia.

 



Llevábamos un tiempo barruntando la idea de hacer un viaje en autocaravana. No lo conocíamos, casi no habíamos visto ninguna, no conocíamos prácticamente nada de las autocaravanas pero nos atraía muchísimo la idea. Solo necesitamos una excusa para dar el paso y adelante. Esas cosas que siempre quieres hacer y nunca se dan las condiciones adecuadas hasta que un día ¡plash!. Y salió hablando en el patio del colegio con unos amigos de mis hijos que justamente estaban tan intrigados por unas vacaciones en autocaravana como nosotros.


 Ellos son cinco,  Xavier y Ángels y sus tres hijos de 7, 9 y 11 años y nosotros cuatro, Maribel y yo (Jose) y nuestros dos hijos de 7 y 9 años.


Xavier como cabeza de familia numerosa sabe los problemas que conlleva viajar cinco personas y nosotros cuatro difícilmente encontramos habitaciones cuádruples por lo que cuando viajamos de hoteles tenemos que reservar dos habitaciones y pagar por los niños como si fueran adultos en muchos casos. Hechos los números, aunque aparentemente el precio por día de alquiler de una autocaravana parezca caro no lo es pues nos da el alojamiento de toda la familia más el transporte y ya no tendrás más gastos que el gasoil porque el resto de comidas es lo mismo que te gastarías en casa.  



 El panorama de las 9 personas novatas en autocaravana y nuestra mente matemática nos exigía una buena planificación sin embargo conforme nos íbamos adentrábamos en el viaje fuimos dando rienda suelta a la imaginación, la improvisación y la adaptación.  Estoy convencido que este fue el factor clave del por qué volvimos tan satisfechos.




 











AC-LLAR Empresa alquiler autocaravanas


 Para una primera experiencia y dado que los niños no habían terminado el cole, elegimos un fin de semana de primavera, de esos de buenas temperaturas y días largos. Alquilamos dos autocaravanas en AC-LLAR, una por familia (por eso de la intimidad) y una ruta no demasiado larga con el fin de no hacer mucho más de 500 kilómetros, así que nos fuimos a la Comarca del Matarraña y los Puertos de Beceite, un destino del que encontramos muchas y buenas referencias en internet para hacerlo en autocaravana.




 Así que un viernes tan pronto salieron los niños del colegio, cargados los coches con todo lo necesario, nos fuimos a las instalaciones de AC-LLAR en Quart de Poblet (Valencia) donde ya teníamos preparadas las dos autocaravanas que nos habían asignado. Ya conocíamos la empresa por sus buenas referencias que tiene en internet y no nos defraudó pues los vehículos eran prácticamente nuevos, totalmente equipados con lo que habíamos solicitado, el personal muy amable y paciente ante las explicaciones y preguntas sobre el funcionamiento; y lo mejor de todo es que Enrique nos dio personalmente su teléfono móvil poniéndose a nuestra disposición las 24 horas por si teníamos algún problema (fue un detalle que agradecimos mucho y nos hizo irnos con total tranquilidad).












Área de Autocaravanas de Morella



Tan pronto salíamos, conforme atardecía, se empezaba a poner el cielo oscuro, y mas negro hacia nuestro destino, el norte de la provincia de Castellón, hasta que empezó a descargar agua a cántaros por lo que ante el primer imprevisto, primera adaptación: como no llegábamos al destino ni por asomo nos quedamos en Morella. ¿Dónde? De pronto vimos un oasis en medio del desierto ¡Viva las áreas de autocaravanas! Estacionamos, cena, los niños a ver un peli pues de la emoción de la autocaravana no iban a poder dormir y nosotros como no paraba de llover a tomar unos gintonic’s en la otra autocaravana ¿qué le vamos a hacer?, como dice el refrán “a mal tiempo buena cara”.











Zona Parking El Parrisal


 A la mañana siguiente el día comenzaba a aclarar así que nos fuimos a desayunar a Morella y, de paso, dar un paseo e hicimos algunas compras. Durante la noche llegaron dos autocaravanas más que hicieron algo similar a nosotros. Un gran acierto el Área ya que por muy poco dinero el Ayuntamiento tiene un goteo continuo de turistas en autocaravana todos los días y un recuerdo a los que la utilizamos muy satisfactorio.











Subiendo por el Matarraña


 A medio día del sábado ya estábamos en Valderrobres que dejaríamos para el día siguiente ya que la idea era llegar a Beceite y de allí a pasar el día en El Parrisal. El problema era meter dos autocaravanas por aquellos pueblos y luego el camino semiasfaltado que nos llevaba hasta el destino, así que hicimos lo que nos recomendaron: ir antes de que todo el mundo vuelva porque con cada coche que te cruces sudarás tinta. Lo cierto es que tanto las calles de Beceite (1Km) como el camino hasta el Parrisal (6 Km) son muy estrechos y hay que ir con cuidado.













Río Matarraña


 El Parrisal es un sitio encantador junto al Matarraña que no describiré pues no voy a ser capaz de plasmar su belleza como realmente corresponde, lo dejo a las guías de turismo que lo describen mejor pero que a mi parecer se quedan cortos pues es impresionante. Ni que decir que la autocaravana se encontraba allí en su hábitat natural, en medio de una naturaleza privilegiada, pasamos el día comiendo, charlando, bebiendo a la sombra de una arboleda mientras los niños jugaban y se bañaban en el río. Un día tan placentero que pensamos que lo ideal sería pasar la noche allí en medio de un silencio tan absoluto, sin cobertura de móvil ni tdt que nos haría despertar todos los sentidos. Pero llegaron unos guardas forestales y nos insinuaron que allí no nos podíamos quedar a dormir a lo que nosotros asentimos pues no íbamos a perdernos la final de la Champions del Barcelona. Acabamos de pasar el día siguiendo el curso del río que del os dejo algunas fotos pues más vale una imagen que mil palabras, recogimos todo y de vuelta a Beceite por el tortuoso camino. Allí, a las afueras, junto a la Oficina de Turismo, hay un parking en el que pernoctamos no menos de 5 autocaravanas, mientras veíamos la final de la Champions (pobre consuelo pues nuestra mente estaba esa noche en El Parrisal).











Parking autocaravanas Beceite (Junto Oficina Turismo)


 





 



 












Comedor Palacio Arzobispal


 













Puente sobre el Matarraña acceso Valderrobres 





 
 















 









Parking junto Centro Salud Valderrobres. Casco histórico al fondo


El último día, domingo, aprovechamos la mañana para conocer  Valderrobres, espectacular, nos sorprendieron sus calles, vimos su Iglesia y Palacio, tomamos unas cervecitas en una mañana calurosa y emprendimos camino de vuelta pero había que buscar algún sitio para comer y de paso que los niños revolotearan por el río pues era lo que más les gustaba. Bajo un puente, tal cual aparcamos, junto al Matarraña y cerca de un pueblo hicimos unas tortillas para comer, tertuliamos mientras decidíamos emprender la vuelta a casa sin encontrar el momento por la paz que despertaba aquel sitio.



 




 
En poco más de tres horas estábamos de vuelta no sin hacer una pequeña parada en San Mateo para ver su centro histórico.

En fin, una experiencia inolvidable, que nos ha dejado con ganas de más así que ya estamos buscando el momento para hacer una nueva escapada con nuestros amigos que ahora que ya somos “unos expertos autocaravanistas” la próxima nos vamos una semana.Por cierto, un acierto que AC-LLAR disponga de un sistema que te permite llegar el domingo por la noche, dejar la autocaravana y llevarte tu coche pues el lunes trabajamos todos y la devolución era un engorro.

Muchas gracias por vuestro relato Xavier y Jose y familias